Conciencia

martes, 9 de diciembre de 2008

Martes 9/dic/08: Feldenkrais, Bones for Life, Educación Somática (II)



I: Buenos días
Cuenta la historia que, entre 1959 y 1967, Moshe Feldenkrais dio las primeras clases de su método a través de sesiones semanales desarrolladas en Tel Aviv, en el formato que luego sería conocido (y registrado) como Autoconciencia a Través del Movimiento. Cuando, posteriormente, decidió formar a los que serían los continuadores y promotores pioneros de su método, eligió a 13 de sus alumn@s, con quienes trabajó la Integración Funcional, modalidad en la que el maestro enseña nuevos patrones de movimiento interactuando con el alumno a través del contacto con las manos. Una de es@s 13 fue Ruthy Alon, quien además de seguir enseñando el Método Feldenkrais® de educación somática, desarrollaría su propio programa: Bones for Life®. En éste, Alon propone la adaptación de postura bien alineada, la coordinación armoniosa de movimientos, y el fortalecimiento de los huesos, como pilares para el bienestar; todo esto logrado a través del movimiento natural, y desde la perspectiva de aprendizaje somático. Las palabras misteriosas de hoy son: Feldenkrais, Bones for Life, segunda parte.

II: La educación somática
Popularmente hemos adoptado la idea de que lo “somático” es lo que tiene que ver exclusivamente con el cuerpo, enmarcado este pensamiento en la idea de que cuerpo (soma, para esta definición) y mente (psique) son dos cosas distintas. Expresiones como “Somatizar las preocupaciones” y “tener una enfermedad psicosomática” son manifestaciones populares de lo arraigado de esta idea, y culturalmente han establecido un paradigma en el que entendemos al mundo y a nosotros mismos a partir de la división del cuerpo y la mente. Hace un par de décadas, el concepto de la somática comenzó a ser reformulado, buscando retomar la visión de Hesíodo, unos siete siglos antes de Cristo, de que el soma es “el cuerpo vivido”. Thomas Hanna, precursor de la nueva somática, definió a ésta como “el arte y la ciencia de los procesos de interacción sinergética entre la conciencia, el funcionamiento biológico, y el medio ambiente”.

A diferencia de una terapia, como la electroterapia, o de un sistema de ejercicios, como Pilates, la educación somática es un camino que permite que el ser humano descubra su propio percibirse en movimiento, comprendiendo cómo hace lo que hace, generando opciones y eligiendo las más cómodas y eficientes para su desempeño en el mundo. Dice el psicólogo quebequense Yvan Joly, entrenador de Feldenkrais, que “el arte y la ciencia de los educadores somáticos no reside en la patología y la sintomatología, la etiología y la sanación, sino en el proceso de aprendizaje sensoromotor, el desarrollo del potencial kinestésico y descubrimiento, dentro del movimiento, de mejores opciones estratégicas”.

Además del Método Feldenkrais y de Bones for Life, existen otros acercamientos a la somática, como la Técnica Alexander, la Eutonía, Body Mind Centering y Hanna Somatics, por mencionar algunos. Muchos practicantes de estos métodos han desarrollado, a su vez, aplicaciones para grupos específicos, como deportistas de alto rendimiento, artistas escénicos, personas en proceso de recuperación física, adultos mayores, e incluso hay trabajo en estos métodos dirigido a los animales, como Equine Hanna Somatics (caballos) y Tellington Touch (perros). (Continuará)
En el blog está la bibliografía consultada para escribir esta serie sobre educación somática, que el próximo jueves llegará a su tercera y última parte: ernestocortes.blogspot.com. Los leo: ernestocortes@itesm.mx

-------------------------------------------
Si desea más información sobre Educación Somática, Feldenkrais y Bones for Life, talleres y coaching personal, cursos y conferencias en Latinoamérica, diríjase a Movimiento Inteligente, e-Centro Latinoamericano de Educación Somática.

1 comentario:

Candia Garibay dijo...

Soma es también en los Vedas, según R. E. Shultes el hongo psicodélico estelar de los pitufos, Amanita Muscaria. Já. Saludos de colores, Candia *