Conciencia

viernes, 8 de febrero de 2008

Jueves 7/feb/08: Puertas




Algunos antropólogos afirman que nuestros antepasados neandertales no conocían el concepto de puerta. Hace 50 mil años la idea de privacidad era distinto, y estaba más basado en normas y conductas sociales que en divisiones físicas. El espacio tribal dentro de las cuevas era comunitario, y se especula que los espacios familiares y personales estaban delimitados simplemente por piedras en el piso.

No fue sino hasta hace algunos 30 mil años, con la supremacía de los cromagnones que eventualmente dieron paso a los homo sapiens, que se afianzó socialmente el concepto de privacidad, y las puertas hicieron su aparición. Las primeras puertas fueron de pieles de animales que eran cazados para servir de alimento, y conforme el tiempo pasó, la tecnología fue avanzando, y las sociedades haciéndose más complejas, las puertas se comenzaron a construir de madera, y posteriormente de metales, cuando la era correspondiente llegó.

Las primeras representaciones gráficas de puertas se encuentran en pinturas egipcias. En Asia menor, con el florecimiento de las civilizaciones, las puertas fueron ganando simbolismo y valor artístico. Las puertas adornadas con motivos religiosos y mitológicos se comenzaron a usar en los lugares de culto, y además de las puertas terrenales, se concibieron también puertas celestes, puertas metafísicas y puertas que daban paso al inframundo.

Hay puertas que se abren hacia adentro, otras hacia fuera, hay las que se deslizan en pares a los lados, y hay las que se esconden tras el mecanismo oculto de un libro que al ser levantado descubre la entrada secreta. Hay puertas que invitan a entrar, otras que están ahí para nunca ser franqueadas. Hay puertas históricas, puertas legendarias, puertas simbólicas. Hay puertas automáticas en las casas y los edificios modernos. Y hay, cada vez más, puertas con detectores de metales que protegen al hombre del hombre mismo, ya no por la intimidad, sino por la sobrevivencia.

No hay comentarios.: